Llamado de Caracol.

Convocatoria al Batey.

8 de marzo del 2025

No cabe duda de que estos tiempos se presentan difíciles para los sectores más vulnerables de nuestras sociedades y, por ende, para los movimientos sociales que trabajamos para transformar las opresiones sistémicas como el racismo, el patriarcado, las estructuras coloniales, la heteronormatividad, el extractivismo producido por un capitalismo voraz, entre otros.  

Una buena parte de los sistemas de gobierno mundiales no sólo han dado un giro hacia el extremismo de derechas, sino que además han comenzado a desmantelar derechos humanos que ya asumíamos como garantizados. En este nuevo periodo, líderes políticos construyen nuevas narrativas que niegan hechos históricos como la trata transatlántica de personas esclavizadas, la violencia generada por los sistemas coloniales, los efectos devastadores de la inequidad de género y la desventaja económica y social producida por los sistemas racistas. 


Estos extremismos de derechas han tomado discursos de líderes como Martin Luther King, torciendo la interpretación en favor de la supremacía blanca para argumentar el concepto erróneo del racismo a la inversa. Por tanto, no han sido sorpresa las primeras decisiones del actual presidente de los Estados Unidos de Norteamérica que impactarán directamente a les inmigrantes, personas racializadas como no blancas, las personas trans y no binaries. No sólo son medidas ejecutivas que despojan de protección y derechos sino, además, un incentivo al odio y a la persecución de estos sectores. La decisión de perdón presidencial a los responsables del motín del 6 de enero de 2021 es un claro mensaje de que conductas violentas en favor del sistema de supremacía blanca y de la heteronormatividad serán permitidas y aplaudidas. 

Este es un ambiente de terror e incertidumbre no sólo para las poblaciones vulnerables sino también para aquellos movimientos que, como el Colectivo Ilé, trabajamos cotidianamente para transformar las opresiones sistémicas. Estos tiempos requieren que cada une haga su trabajo bien y de manera consistente. Reconocemos que será importante el fortalecimiento de viejas alianzas y el surgimiento de nuevas alianzas. En este proceso debemos confiar en nuestra sabiduría; no podemos exigirnos estar en todos los espacios coordinando esfuerzos pero sí podemos apoyarnos participando en eventos, sumándonos a las acciones en la calle, haciéndonos presente en cuerpas-almas-espíritus en dónde seamos llamades a estar y difundiendo información importante en nuestros círculos de influencia para ser muralla contra todo lo que se avecina. También podemos comenzar a integrar en nuestros discursos y en nuestras prácticas una mirada transversal de la opresión y una prácticas de espacio abierto que nos hagan sentir bienvenides y segures en cada uno de nuestros espacios de resistencia. En este momento nos salvamos todes o nos ponemos en peligro todes. 


La sabiduría de nuestres ancestres nos dice que en la tormenta que se avecina hay que cuidar nuestras cuerpas, generando entre nosotres espacios de cuidado y cariño. Siempre tendremos conflictos y miradas diferentes, y eso debe ser entendido como nuestra fortaleza, nunca como nuestra debilidad. 

En el Colectivo Ilé estamos listes para la jornada desde nuestras especificidades y por medio de los recursos y las capacidades que tenemos. Es tiempo de acogernos, para salir a contar las historias que se habrán de negar o de invisibilizar. 

Es tiempo de hacer uso de nuestra creatividad, de no abandonar la alegría ni la esperanza. 

Tejamos millones de telarañas para contener los monstruos.

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Pronunciamiento Colectivo Ilé: Políticas Migratorias Racistas Trump